Cierre y mapa de documentos

Este recorrido geográfico de la mano de los protagonistas de las revolución mostró un abismo entre formas divergentes de entender la soberanía, cada una con proyectos distintos para instaurar orden en medio de la turbulencia. 

Está claro que los acontecimientos y actos de agencia no se pueden desligar ni de su contexto histórico ni de su lugar de enunciación. A diferencia de la lengua —que como construcción social se remite a sí misma—, los discursos siempre remiten a otros. El escenario gana en complejidad al reconocer que los discursos son disímiles y, en algunos casos, incoherentes. El prisma de la geografía mostró que, aún las cercanías, tiempo y espacio, hubo variaciones fundamentales en la representaciones de la comunidad política: por ejemplo, en 1813, no fue lo mismo el discurso realista en Santafé que en Santa Marta, cuando una y otra se convirtieron en cuarteles de causas enemigas.

Esta curaduría confirmó que las propuestas por renovar la comunidad política variaron de acuerdo a su lugar geográfico de enunciación. En el camino, se configuraron polos de opinión con numerosas posturas intermedias. La discusión entre los federalistas y centralistas, en el seno de los republicanos, es solo un ejemplo entre varios. Asistimos a plazas que pasaron de mano en mano entre bandos enfrentados, vimos la emergencia de enemistad entre antiguos aliados y la separación definitiva de proyectos de integración. Juramentos y retracciones, espías y verdugos, censuras y honores, saqueadores y anexiones forzadas. Testimonios de civiles, militares, eclesiásticos, extranjeros, esclavizados y mujeres en un escenario accidentado. En el terreno de lo incierto, estos interlocutores disímiles estuvieron igualmente autorizados para cuestionar el presente y prever el futuro. Al final sólo uno de ellos triunfó y es nuestro presente. Sin embargo, tal como entonces, las condiciones del actuales siguen convocando promesas de futuros posibles, tal vez más justos e inclusivos que los que se formaron inmediatamente después de la revolución.

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